Preparar la ganache montada: picar el chocolate blanco y verterlo en un bol.
Hervir la nata líquida y verter poco a poco sobre el chocolate, sin dejar de remover, hasta obtener una mezcla homogénea y lisa.
Dejar enfriar en la nevera.
2 EL CRAQUELIN (OPCIONAL)
90 g Harina
90 g Azúcar
75 g Mantequilla semisalada
Mezclar con los dedos la mantequilla, el azúcar y la harina.
Con un rodillo, extender muy finamente (1 mm)la masa obtenida entre 2 hojas de papel sulfurizado y reservar en el congelador.
3 La masa choux
200 g Harina
25 g Mantequilla semisalada
4 g Agua
6 g Leche
120 g Huevos medianos
50 g Azúcar
Calentar en una cacerola el agua, la leche, la mantequilla y el azúcar.
Cuando la mezcla esté hirviendo, retirar la cacerola del fuego y verter la harina en una sola vez.
Mezclar bien para obtener una masa muy espesa que debe despegarse de los bordes de la cacerola (si es necesario, poner de nuevo la cacerola en el fuego para obtener este resultado).
Añadir uno a uno los huevos y trabajar bien la masa después de añadir cada huevo.
Precalentar el horno a 200 °C.
Con una cuchara pequeña o una manga con boquilla, escudillar montoncitos de masa sobre una placa de cocción con papel sulfurizado.
Montaje
Sacar la placa de craquelin del congelador. Cortar aros con un cortapastas a la medida de los choux y colocarlos inmediatamente sobre los choux. Hornear durante unos 20 minutos o hasta que los choux estén bien dorados e inflados. Dejar enfriar y hacer un pequeño agujero en cada uno de ellos con la punta de un cuchillo. Con una batidora, montar la ganache reservada como si fuera una chantilly. Verter en una manga con boquilla y rellenar los choux.